CAL UN PACTE D'AUSTERITAT I RESPONSABILITAT PER LA MALA SITUACIO PRESUPOSTÀRIA

 PROPUESTA DE ACUERD0 POLÍTICO POR LA ECONOMIA LOCAL

 La situación económica del presupuesto municipal no es buena. La podemos definir, sin exageraciones, como bastante delicada. Pero también podemos asegurar que estamos a tiempo de tomar les medidas necesarias para mejorarla y evitar, de este modo, males mayores. Y esto exige la voluntad y el esfuerzo responsable de toda la Corporación.

En primer lugar conviene determinar  los motivos, las razones o las causas que la han provocado. Y debemos hacerlo sin culpabilizar a nadie.   A  mi entender, las causas son de dos tipos: generales y particulares (también lo entienden así sindicatos y empresarios)

Las generales son aquellas circunstancias que afectan a todo el país (y a todo el mundo). Afectan  a la administración central, autonómica y local.

La crisis económica ha repercutido en los ingresos de todos los ayuntamientos alterando el funcionamiento de algunos muy significativos.

Los ingresos municipales ligados al Impuesto de Bienes Inmuebles o al Impuesto sobre Vehículo de Tracción Mecánica son los únicos estables.  Pero los ligados a las plusvalías y a los impuestos que gravan la construcción y las obras (ICyO), se han desinflado. Así pues el impacto de la crisis se nota en dos importantes fuentes de ingresos:

1. Bajan los ingresos por licencias e impuesto y construcciones (ICyO)
2. Bajan los ingresos por plusvalías

Para afrontar esta situación, las entidades locales recurrieron a los ahorros acumulados en años anteriores para pagar sus gastos ordinarios. El remanente de tesorería conjunto cayó en picado. Y un total de 156 entidades locales, casi un tercio, incurrieron en déficit según informe de la Sindicatura de Comptes.

Y, en no pocos ayuntamientos, ni eso era suficiente. El ayuntamiento de Valencia ha tenido que pedir un préstamo urgente de 40 millones de euros para poder hacer frente a las facturas. Otra prueba de que se trata de un problema general.

Otras causas son particulares o de ámbito local. Esto es, producidas por decisiones municipales. Son factores, que aún no siendo los desencadenantes de la situación económica la han agravado o, cuanto menos, no han contribuido a su control, si no que más bien la han agravado. Por ejemplo:

·                     La implantación de sueldos exagerados o la retribución dineraria a todos los concejales del equipo de gobierno. Medida que ,en nuestro pueblo,  triplicó el gasto anterior pasando de unos 70.000 € a más de 200.000 euros

·                     El aumento de asesores y gastos en bufetes jurídicos

·                     Y los gastos de tipo suntuoso, superfluo e innecesario.

El resultado se puede resumir, simplificando, en dos variables. El año 2007 el presupuesto tuvo un superávit (remanente de tesorería) de 1.800.000 euros –más de 300 millones de pesetas. Y la deuda  estaba entre el 18- 25 % (según informes de intervención que puede concretar estas cifras para ser más exactos y rigurosos). Ahora, la deuda esta en torno al 50 % (tres veces más, aunque lejos del 110% de otros ayuntamientos como Valencia a cuyos niveles no deberíamos llegar). Y superávit no parece que vaya a haber.

Aquella situación de presupuesto saneado que dejamos en 2007 no solo era resultado de una forma de gestionar; sino también de que la situación general era favorable. Ahora no es momento de buscar culpas ni meritos. Es la hora de tomar decisiones. Hasta el Rey ha pedido a los partidos que se dejen de debates estériles, aparquen sus diferencias y pacten soluciones. La iniciativa del Jefe del Estado (igual que las demandas de sindicatos y empresarios) también afecta a los ayuntamientos.

Por lo tanto, creo que también nosotros,  tenemos la obligación y la responsabilidad de intentar alcanzar acuerdos para sanear, entre todos, el presupuesto. Nuestros vecinos nos lo exigen y lo agradecerán. Son numerosas las medidas que entre todos podemos acordar y adelanto algunas posibles como las siguientes:

·   Reducir gastos innecesarios y superfluos para destinarlos a servicios de primera necesidad

·   Reducir el gasto en asesores

·   Reducir el gasto en personal en varios sentidos

o        Control de horas extras para que se hagan las estrictamente necesarias. Y en caso de ser muchas que se contrate personal del pueblo para reforzar los servicios municipales con locuaz damos trabajo a más vecinos, sobre todo. jóvenes

o        Paralización inmediata de los  procedimientos de selección de personal en curso hasta que la Comisión integrada por todos los grupos pueda valorar su repercusión presupuestaria (que junto a otras decisiones pueden disparar el gasto de personal en 400. 000 euros. Cantidad que, con toda seguridad, no puede soportar nuestro presupuesto)

• Potenciar la contratación de parados del pueblo con lo cual activamos la economía local. Cuantas más familias obtengan ingresos más se estimula el consumo lo cual repercute en la actividad comercial del pueblo.

Para analizar las medidas deberíamos constituir una comisión específica o utilizar la de personal ya constituida. Lo que importa es que todos los grupos estén representados para que puedan aportar su punto de vista, su valoración, sus soluciones.

El presente documento es solo una propuesta, muy  mejorable por supuesto,  para  racionalizar el presupuesto. El objetivo es que no se deteriore más la situación económica.

No se pretende provocar debates o confrontaciones estériles que solo generan malestar, división y crispación pero no sirven para solucionar los problemas.

En estos momentos, desde la responsabilidad, solo sirve una estrategia: analizar la situación económica, diagnosticar los motivos y proponer las soluciones que entre todos, y digo ENTRE TODOS, sirvan a los intereses de nuestro pueblo. Se trata de encarrilar y poner orden en la gestión presupuestaria.

Utilizo, como conclusión y llamada a la responsabilidad, las palabras de (Eloy Dura, Pte. De la Federación constructores Valencianos) que resumen el sentir de las fuerzas sociales valencianas (cinco federaciones empresariales y los dos sindicatos mayoritarios, UGT y CCOO)

"No ser valientes y no atacar los problemas en los cimientos con un consenso de todos los partidos políticos, nos lleva a mayor paro. No podemos seguir de brazos cruzados mientras nuestra economía se despeña".

Las consideraciones previas no deberían quedar en una mera reflexión teórica, en consecuencia, si se consigue un acuerdo por la economía local, las propuestas podrían concretarse sometiendo al pleno la adopción de los siguientes acuerdos en forma de

MOCIÓN

1. Paralizar de forma inmediata los procedimientos de selección de personal (concursos y oposiciones) en curso hasta conocer su impacto presupuestario.
2. Analizar en Comisión (Constituida al efecto o ya existente) integrada por todos los grupos la repercusión presupuestaria de estas plazas y decidir en función de la situación su continuidad total o parcial o su “congelación” hasta que la situación económica las haga viables.
3. Reducir de forma consensuada en el seno de la citada Comisión las partidas que no se consideren prioritarias
4. Establecer, de común acuerdo con el personal,  un plan de promoción y mejora retributiva progresivos de los niveles inferiores con carácter plurianual considerando siempre la capacidad presupuestaria para absorberlos. Lo justo es mejorar primero a los que tienen retribuciones más bajas.
5. Ampliar los recursos destinados a combatir el paro local mediante un Plan de Empleo Local ya propuesto en su día. Las medidas anteriores proporcionan un ahorro que debería destinarse a dar más jornales a los parados del pueblo.
6. y cuantas otras propuestas podamos consensuar en la citada Comisión parta impulsar medidas de austeridad compatibles o facilitadotas de políticas  sociales